El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz ha inaugurado el Centro de Día de Menores SUR, ubicado en el espacio Los Alambres  en la avenida de los Teatinos. Se trata de un recurso municipal que atenderá a 22 menores con edades comprendidas entre los 3 y los 13 años en riesgo de desprotección, con cuyas familias se está interviniendo desde los Servicios Sociales Municipales. El 20% de las plazas se destinarán a menores con diversidad funcional. Centros de Día para menores en Sevilla

Dos nuevos Centros de Día para menores se ponen en funcionamiento en Sevilla

Este centro aborda todo lo relacionado con el desarrollo integral de los menores y también centra en sus familias, velando por sus competencias y responsabilidades parentales. Tiene un carácter de atención inmediata, temporal y complementaria de la intervención profesional de los servicios sociales que ya se lleva a cabo. Este espacio desarrolla una función preventiva a través de actividades de ocio y cultura, entre otras, con el fin de compensar las deficiencias socioeducativas de los menores, potenciando su desarrollo personal y la integración social de éstos y sus familias.

Un equipo formado por educadores, monitores y psicólogos estimulan el desarrollo autónomo y de su integración social, incidiendo en sus vidas cotidianas. Estos profesionales impulsan el autoconocimiento y la autoconfianza de estos menores en riesgo de exclusión social, refuerzan su aprendizaje escolar y desarrollan e incrementan las habilidades y competencias sociales.

Sanz ha explicado que este centro supone un gran ejemplo de instrumento social para estos menores y sus familias, un espacio que está integrado en el barrio, con amplias aulas y zona ajardinada. Por ello, se ha recuperado un espacio con intervenciones de pintura, albañilería y cambio de mobiliarios.

Junto al Centro de Día de Menores Sur también ha iniciado su funcionamiento el del distrito Triana-Los Remedios en C/ Farmacéutico Murillo Herrera. Ambos realizan una atención individualizada con cada menor, basada en compensar las necesidades y carencias detectadas del menor. Por otro lado, la dedicación es grupal, para que los menores adquieran hábitos saludables de vida cotidiana y de convivencia que refuercen sus capacidades de socialización y finalmente, se presta un servicio orientado a las familias, para que puedan integrar en su vida cotidiana los hábitos adquiridos por los menores.

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