El clima, la playa, sus paisajes, las infraestructuras o sus servicios han convertido a Málaga en un rincón referente en cuanto a calidad de vida. Tanto es así que, desde el pasado siglo, la provincia ha ido experimentando un crecimiento poblacional notable; el Instituto Nacional de Estadística la sitúa como la sexta en cuanto a población en España, con 1.773.136 personas censadas.

No obstante, lo cierto es que la distribución de sus habitantes es acusadamente desigual, ya que la mayor parte de estos se concentra en los municipios pujantes de la costa, mientras amplias zonas de montaña e interior miran cara a cara a la lacra de la despoblación.

Los 5 más poblados

Según la última actualización de los padrones del INE, las grandes urbes costeras de Málaga siguen siendo las más grandes en términos poblacionales, con el indiscutible liderazgo de la capital, que se acerca año tras año a la barrera de los 600.000 habitantes con un total de 591.637 habitantes en la actualidad. Se trata de casi 25.000 personas más que hace justo una década en 2014.

El segundo puesto en cuanto a población lo sustenta Marbella, con 159.000 habitantes, por los 138.679 que eran hace diez años. En ese mismo periodo de tiempo, la localidad de Mijas, la tercera en el ranking, ha pasado de 77.521 a los 93.302 de la actualidad.

¿Cuántos habitantes tienen Málaga capital y provincia según el último padrón oficial del INE?

El cuarto y quinto puesto lo disputan los municipios costeros de Vélez-Málaga y Fuengirola, cuya diferencia en el número de empadronados es mínima. 85.990 habitantes en el caso de la localidad de la Axarquía y 85.859 en la costasoleña Fuengirola. Si bien el crecimiento en Fuengirola ha sido notablemente mayor que en Vélez, ya que hace una década eran 10.000 habitantes menos (75.856), mientras que los veleños eran 8.100 personas menos (77.808).

Los 5 menos poblados

El desequilibrio en torno a la distribución y tendencias de la población malagueña es de lo más acusado. Los más de 591.000 habitantes de Málaga capital contrastan con los 187 empadronados en la localidad de Atajate, ubicada entre los valles del Guadiaro y del Genal.

Lo más llamativo de este pueblo es que hace diez años su población era de 133, es decir, que ha experimentado un crecimiento sobre su censo. Esto se debe en parte a varios factores, como puede ser la creciente tendencia por el mundo rural desde la pandemia, el impulso del turismo interior o la llegada de propietarios extranjeros, que desde hace años encuentran en esta zona de Málaga un enclave repleto del romanticismo andaluz.

El que hasta hace dos años era el pueblo menos poblado de Málaga, Salares, ahora es el penúltimo, con 198 personas registradas en su padrón. En 2014, este pequeño pueblo de la Axarquía contaba con 221 habitantes.

El tercer, cuarto y quinto puesto se reparten entre los pueblos de Júzcar (227, por los 232 en 2014), Cartajima (229, antes 252) y Benadalid (234, que eran 253). Todos ellos, de forma más o menos acusada, han perdido población en la última década.

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