Llega enero y con él las primeras licitaciones de inversiones públicas. Entre los beneficiarios se encuentra la flota del servicio municipal de prevención, extinción de incendios y salvamento. Está previsto que infraestructura del cuerpo de bomberos se refuerce de 28 vehículos nuevos hasta el año 2028, siendo el 2025 el punto de partida con la incorporación de ocho vehículos.

El plan de renovación pretende rejuvenecer la edad media del parque móvil que cuenta con 54 vehículos (34 pesados y 20 ligeros) con un presupuesto total de 10.956.000 euros. De esta forma se renovaría más de la mitad de la flota, dotando de mayor tecnología y reduciendo el impacto medioambiental. El procedimiento de compra de los primeros ocho nuevos vehículos ha salido a concurso por un importe de 4.758.694,05 euros y un periodo de entrega máximo de 14 meses.

Los ocho vehículos que reforzarán al cuerpo de bomberos este año son: Una autoescala de 42 metros articulada para rescates en altura (1.200.604,35 euros), dos bombas urbanas pesadas (1.197.263,54 euros), dos autobombas rurales pesadas (1.069.030,16 euros), un vehículo ligero para el rescate en altura (113.256 euros) y dos furgones de útiles con material de rescate en caso de accidentes (1.178.540 euros).

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Posteriormente, el plan de inversiones hasta 2028 en próximos ejercicios presupuestarios incluye la compra otras tres autobombas rurales pesadas, cuatro autobombas nodrizas pesadas, una autoescala compacta de 32 metros, un furgón de útiles varios, otro de salvamentos varios, ocho vehículos ligeros tipo turismo y todoterreno, un furgón de apeos y apuntalamientos y un vehículo taller.

Además, se ha formalizado el contrato de revisión, reparación y mantenimiento de los vehículos de rescate en altura de Bomberos, con un presupuesto de 119.999,53 euros y un plazo de ejecución de dos años. Este servicio da cobertura al autobrazo y las tres autoescalas de 32 metros, mientras la autoescala de 20 metros.