El Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Sostenibilidad Medioambiental, reabre este próximo sábado, 13 de septiembre, el Parque de Huelin, una vez descartado que la muerte de ejemplares registrada a finales de agosto se debiera a un episodio de gripe aviar.
De esta forma, el Consistorio ha señalado que según los resultados de las analíticas realizadas a las muestras tomadas de las aves en el Laboratorio Nacional de Referencia para la Influenza Aviar (Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, en Madrid), dependiente del Ministerio de Agricultura, y que han sido reportados al Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de la Junta de Andalucía, los ejemplares presentaban una alta carga vírica de la Enfermedad de Newcastle.
Dicha enfermedad sólo afecta a aves sin que exista incidencia ni repercusión negativa en la salud pública y por esta época del año suele provocar la muerte de aves silvestres en este espacio y en otros puntos de la ciudad. Una vez notificados los resultados por la Junta de Andalucía, el Parque de Huelin volverá a abrir al público, después de haber estado clausurado como medida preventiva desde el pasado 3 de septiembre.
El ayuntamiento seguirá manteniendo las precauciones tras descartar esta gripe en los parques de málaga
En cualquier caso, y pese a que no se han registrado nuevos casos sospechosos ni en el Parque de Huelin ni en ningún otro parque público con lagos o estanques, desde el Consistorio de Málaga se van a seguir manteniendo las precauciones y el refuerzo de la vigilancia en todos los humedales.
Tal y como ha informado la Junta, la muerte de los ejemplares recogidos en el Parque de Huelin se ha debido al virus de la Enfermedad de Newcastle. En este caso, se trata de una zoonosis leve frecuente, que ya ha afectado en otras ocasiones a parques urbanos de Andalucía, como el de Huelin.
El riesgo para las personas si se manipula un ave muerta con esta enfermedad es mínimo. Por ejemplo, puede causar una queratoconjuntivitis si una persona se frota los ojos después de tocar el ave. Por ello, se sigue recomendando a la población no tocar a las aves muertas o moribundas que encuentren.