Los hermanos Sophie y Rafael Martínez Machado publican con la editorial Círculo Rojo su obra de fantasía ‘El espíritu del rayo’, ambientada en el Brasil colonial e inspirada en las anécdotas de su abuela sobre la historia de este país, sumado a los consejos de sus padres sobre cómo gestionar el tiempo. Según la palabra de los autores, el lector va a encontrar “aventuras, amor, amistad e intriga”.

Ambos han explicado a través de una nota de prensa de la editorial que hay dos cosas que les han inspirado a la hora de escribir este libro. “Por una parte, las historias que nos contaba nuestra abuela de Brasil, y, por otro lado, cuando nuestros padres nos prohibían jugar a videojuegos o coger el teléfono, nuestra palabra habitual era que estábamos aburridos y ellos nos respondían ‘pues leer un libro’ y nosotros respondíamos ‘ya hemos leídos los libros que nos gustan, los demás libros nos aburren'”. Ellos nos respondían, “pues escribid uno”.

SINOPSIS

En cuanto al argumento de la obra, la historia se centra en Pescadito (Blisk) y Kyra, dos jóvenes esclavos huidos que se refugian en un quilombo –asentamiento de esclavos huidos– en la época del Brasil colonial. Su búsqueda de libertad e igualdad hará que recorran todo Brasil, donde las aventuras y desventuras se mezclarán por igual, lo que hará que “conozcan el significado del amor, la amistad y la traición”.

Siempre les acechará el peligro de volver a ser esclavos si vuelven a ser capturados, pero arriesgarán sus vidas por conseguir su anhelo de libertad para su pueblo y sus amigos, siendo sus actuaciones algunas veces incomprendidas, lo que les ocasionará más de un problema, que intentarán solventar con valentía, audacia e inteligencia.

Al mismo tiempo, surgirán sus miedos y sus frustraciones, con las que irán aprendiendo a lidiar conforme se van haciendo adultos, en un mundo donde “la compasión no tiene cabida y los negros son peor tratados que los animales”.

Sophia y Rafael Martínez Machado nacieron en España, aunque son de padre español y madre brasileña, por lo que tienen una mezcla de cultura de la que han asegurado que “están orgullosos”. Tienen 15 y 13 años, estudian en el liceo francés y sus ‘hobbies’ son las artes marciales y el baloncesto. Desde pequeños, su pasión es la literatura y “soñar despiertos con fantásticas aventuras que dejan volar nuestra imaginación”.