El Hospital Materno Infantil ha puesto en marcha en la quinta planta de hospitalización el ‘lenguaje PAIP’. Se trata de una iniciativa pionera dentro del plan individualizado de atención para los menores que ingresan con el que se pretende dar respuesta social de forma pormenorizada a los pacientes y a sus familias cuando estén hospitalizados. Este se enmarca dentro del Plan de Humanización del Hospital Regional Universitario de Málaga.

El Plan de Atención Individualizado Pediátrico (PAIP) es un proyecto de la Dirección de este centro, que nació en 2022, y que se ha ido implementando de forma paulatina en las unidades de hospitalización de Pediatría del Hospital Materno Infantil. Una vez marcadas las pautas, se ha implementado el ‘lenguaje PAIP’, que con pictogramas notifica de forma visual a los profesionales sanitarios la situación de cada menor.

Para ello, esta iniciativa ha comenzado a pilotarse en la quinta planta de hospitalización de Pediatría, en la que ingresan habitualmente menores de más de cinco años que han sido sometidos a cirugías o que precisan estudio o tratamiento médico hospitalario.

En el interior de la sala de trabajo se ha instalado una pizarra magnética que se divide por áreas y habitaciones que, a su vez, habilita un espacio para la parte asistencial –tarjeta identificativa: especialidad responsable, patología, estado del menor, estudios diagnósticos pendientes y todo aquello necesario desde el punto de vista clínico– y otro para el lenguaje PAIP.

En este sentido, la coordinadora del PAIP en el Hospital Materno Infantil, Isabel Cabrera, ha explicado que estos casilleros están destinados a informar de la situación del paciente y de su estado emocional, para lo que se ha utilizado el sistema de comunicación aumentativo Arasaac que se basa en el uso de pictogramas para facilitar la comunicación.

De este modo, se han elaborado y distribuido reproducciones imantadas de seis tipos de pictogramas que informan de la situación social, emocional y familiar del menor. La situación de cada menor será revisada a diario y velará por la misma, desde el punto de vista psicosocial, su enfermera referente, que indicará con pictogramas su situación diaria en su apartado PAIP del tablón interno.

Con dibujos sencillos, se recogen los seis estados de abordaje diario del paciente pediátrico: paciente pendiente de valoración facultativa; menor que puede realizar con total normalidad sus actividades escolares con las maestras del Aula Hospitalaria; que ha de permanecer en su habitación por criterio clínico, pruebas o si su valoración emocional así lo requiere; situación de aislamiento por criterio clínico o situación o sospecha de violencia de género y, en último lugar, que el paciente podrá asistir a cualquier actividad lúdica realizada en el hospital o recibir visitas de la misma índole.

«El lenguaje PAIP está inmerso dentro del plan de humanización del servicio de salud público de Andalucía poniendo el foco en la importancia de las emociones en el proceso de la enfermedad apostando por tanto por un abordaje terapéutico integral de calidad», ha añadido.

La salud emocional del menor es clave para la recuperación de su salud física. La responsable de Pediatría, Esmeralda Nuñez, ha explicado que «la salud emocional y la física están estrechamente relacionadas y se influyen mutuamente».

De esta forma, ha continuado, «velar por el bienestar emocional de los menores ingresados, además de una responsabilidad, es una obligación ya que sabemos que tiene un impacto positivo hacia la alimentación, el sueño y la recuperación del proceso de enfermedad. Esta herramienta de comunicación facilitará la puesta en marcha de medidas que minimicen los efectos de la hospitalización», ha agregado.

El lenguaje PAIP, recién implantado en la quinta planta, servirá como experiencia piloto para ser instaurado en el resto de unidades de hospitalización pediátricas. El año pasado ingresaron en el Materno Infantil de Málaga 4.200 niños –en las unidades de Pediatría (2.100), Cirugía Pediátrica (890), Neonatología (770), 520 ingresos en Cuidados Intensivos Pediátricos– y 115.900 fueron atendidos en las Urgencias Pediátricas.